Recortes de Prensa

Recorte de prensa: 


VIVA - Centro de Andalucía (03.10.2011)





La Crónica - Comarca de Antequera (18.12.2010)




Ampliacion:




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Faldón:    La Crónica - Comarca de Antequera 






Faldón: Las 4 Esquinas - Febrero 2010
"Campaña San Valentín"








Colaboraciones:


Revista "Las 4 Esquinas" de Antequera 


Marzo 2010


Una Piel cuidada
de forma Natural

Los cosméticos son productos que se aplican para mejorar la apariencia e infundir un sentimiento de autoconfianza y autoestima, es decir, para parecer mejor, oler mejor y sentirse mejor. No obstante, la estética no tiene que estar reñida con la salud. Nuestra piel actúa como una barrera que impide tanto la pérdida de sustancias del cuerpo como el paso de sustancias del exterior. Por este motivo es fundamental tenerla cuidada y sana. 

Es importante que los productos que utilicemos para cuidar y limpiar nuestra piel sean eficaces y que se puedan utilizar tanto por su valor estético como terapéutico. 

Los productos cosméticos naturales, exentos de productos derivados del petroleo, son una alternativa para tener nuestra piel sana y cuidada. Las materias primas con las que son
elaborados estos productos cosméticos, como por ejemplo el jabón natural, son utilizadas tradicionalmente por sus cualidades beneficiosas para el organismo, como el aceite de oliva virgen extra, el cual aporta  numerosas sustancias nutrientes, hidratantes, emolientes, suavizantes y protectoras de la piel ante las agresiones externas, tales como la contaminación, el sol, el frío...

¿Como actúa el jabón natural sobre la piel?
La función de barrera que desempeña nuestra piel, se puede ver afectada con la utilización de jabones  agresivos a la misma. Un jabón excesivamente alcalino, elimina el sebo natural de la piel y penetra en la  proteína queratina de la capa mas externa de la piel provocando que la piel se vea desprotegida, perdiendo  su función barrera.
La utilización continua de un jabón bien elaborado a base de ingredientes naturales seleccionados cuidadosamente, por sus propiedades benefactoras para el organismo, ayuda a mantener esta barrera que es nuestra piel, en buen estado.

Una piel cuidada, es una piel sana y bella, por lo tanto nos vemos mejor, olemos mejor y nos sentimos mejor.

Yolanda Pozo
Artesana Jabonera
Tienda Naina.



Abril 2010




Higiene
Facial

La piel se ensucia porque se adhieren a ella variedad de partículas que encontramos en nuestro entorno,  desde las pequeñas escamas cutáneas provenientes de la descamación natural de la misma, hasta el polvo del aire que nos rodea, incluyendo, el sudor, el maquillaje, partículas provenientes del humo del tabaco, entre otros.

En el proceso de eliminación de la suciedad, también eliminamos el sebo que protege nuestra epidermis. Para paliar la pérdida excesiva de este sebo cuando la suciedad se elimina totalmente, es necesario utilizar un producto que contenga otra grasa con afinidad cutánea. Para la limpieza facial, utilizamos Jabones y lociones limpiadoras, ambos productos elaborados con una base grasa de origen animal. 

Gracias a los estudios, podemos encontrar en el mercado una extensa gama de estos productos que son elaborados con aceites vegetales, sin componente animal, con las mismas propiedades, beneficiando a nuestro organismo, a la vez que le aporta una suavidad y brillo característicos.

Una buena limpieza facial, se ve complementada con la aplicación de calor, mediante un baño de vapor. El calor dilata los poros aumentando la secreción de las glándulas sudoríparas y expulsando toda la suciedad fuera del poro. Para finalizar, el uso de un astringente natural como puede ser el agua fría, contribuye a cerrar los poros, además de proporcionar una refrescante y agradable sensación en nuestra piel, quedando esta totalmente limpia.

Una limpieza facial no agresiva, se resume en tres pasos:
       - Lavar con Jabón Natural elaborado con aceite vegetal
       - Baños de Vapor para abrir poros y eliminar la suciedad a fondo.
       - Agua fría para refrescar y cerrar los poros

Yolanda Pozo.




Mayo 2010



El Jabón
Una Tradición con Historia

La leyenda romana afirma que el jabón fue descubierto en el monte Sapo, junto al río Tiber. En aquella época, existian rituales ceremoniales en los que sacrificaban animales junto al fuego. Con la mezcla de la grasa de los sacrificios junto a las cenizas, en el borde del rio, los esclavos notaron sus propiedades para limpiar.

En cada una de las antiguas civilizaciones que han existido a lo largo de la Historia, aparecén inscripciones que hacen referencia al uso del jabón y a sus métodos de fabricación. 
Durante el segundo siglo, el uso del jabón era estrictamente medicinal. Galeno fue el primero en mencionar el jabón para la higiene personal o el lavado de las ropas. También observó que la limpieza tenía un efecto curativo en las enfermedades de la piel.

Málaga se convirtió en el Siglo XIX, en la primera provincia Andaluza en producción de jabón. En Antequera y su Comarca, el jabón de toda la vida, el que se hace con aceite usado, sosa, agua y sal, ha sido tradición familiar, transmitida de madres a hijas. Este jabón de aspecto blanquecino y un característico olor a rancio, se ha usado y aún sigue usandose en familias más tradicionales, para lavar ropa, suelos y en alguna que otra ocasión para tratar afecciones en la piel.

Son tradiciones propias, que llegaron suscitadas por la precariedad de la economía vivida en nuestra historia. Hoy día se siguen conservando, incluso innovando, al darle carácter cosmético con el uso de materias primas mas aptas para nuestra piel.
Yolanda Pozo.

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